viernes, 29 de febrero de 2008

Espiral

Hay gente que vive en un círculo del que no sabe salir. Otros, lo hacen sobre las perfectas líneas que trazan los cuadrados. Algunos, los más puntiagudos, se encierran en un triángulo y van recorriendo los tres lados en perfecta simetría, pero en distinta angulación, según el momento. También los hay de poliedros, pero esos son los menos.

Yo particularmente vivo en una espiral. Vivir en una espiral es realmente jodido porque todo se repite cíclicamente: los hechos, las personas, los sentimientos, las ilusiones y las frustraciones. La diferencia con el círculo es que con la espiral tienes durante un corto periodo de tiempo la sensación de que has salido de ahí, pero esa sensación no es real. A veces la espiral se estrecha y te asfixia, otras veces se ensancha y te deja respirar, pero aunque parezca que estás en una geometría distinta, siempre estás ahí, encerrado entre sus bucles, engañado por una ilusión óptica, si es que después de dar tantas vueltas todavía te queda algo de ilusión.

A veces intentas tomar impulso y salir, pero sólo consigues que la espiral se deforme momentáneamente, otras veces simplemente te dejas arrastrar por el sinuoso camino que te marca. Supongo que cada vez me sienta peor tomar conciencia de la realidad, aunque la verdad es que nunca se me dio bien la geometría.

miércoles, 27 de febrero de 2008

El punto G. Ese gran desconocido

Para que veáis que todavía queda gente que jamás ha oído hablar del punto G. He de agradecer el descubrimiento de este documento a mi madrileño más favorito. Un besis corason!!!

lunes, 25 de febrero de 2008

Coherencia... ¿Cohe lo qué?

Mientras vosotros veis el debate (oh my god, de qué hablaré mañana en el trabajo) voy a aprovechar para hacer una reivindicación un tanto personal sobre la coherencia interna de algunas publicaciones.

Me vengo a referir a esos suplementos que adjuntan los diarios los sábados, dedicados especialmente a las mujeres. La ubicación de estas publicaciones está estratégicamente decidida, ya que se ha comprobado que el sábado es el día en que las mujeres compran más la prensa. No me gustan este tipo de revistas, aún así, hace un par de semanas abrí una por curiosidad antropológica y esto fue lo que encontré en el mismo ejemplar.

1. Carta premiada: una chica relata que no encuentra ropa de su talla porque tiene unos kilitos de más. Crítica al suceso por parte de la seleccionadora de cartas.

2. Sección de sociedad: una redactora escribe una columna sobre las actrices de Holliwood que han cogido peso y las anima a apuntarse a un gimnasio.

3. Sección de psicología: que no te incomoden esos kilos de más. La belleza está en el interior.

4. Sección salud: dietas hipercalóricas para perder peso.

5. Consultorio: una chica escribe una carta explicando cómo su sobrepeso le acompleja. Las especialistas le aseguran que no tiene por qué preocuparse.

6. Sección de ciencia: liposupciones seguras para moldear la silueta.

Repito que todas estas secciones las encontré ubicadas en el mismo número de la revista. Tras cerrarla pensé que ojalá las lectoras no hiciesen mucho caso a los contenidos de esa publicación. Al fin y al cabo incitan a una cosa muy clara: la esquizofrenia.

viernes, 22 de febrero de 2008

Historias patéticas III

He llegado el momento de trasmitiros otra de las historias patéticas de mi vida. Os aseguro que todos los escritos que se engloban bajo este epígrafe están basados en hechos completamente reales, aunque a veces cueste de creer. Pero así es mi vida y con los años no sólo lo he aceptado sino que he desarrollado una serie de capacidades para tratar con seres surrealistas. Ahí va el suceso:

Como no, era verano y, como no, esperaba a mi querida María para dar una vuelta por las calles desiertas de la ciudad en la época estival. Solíamos quedar en una encrucijada de caminos entre mi parada del autobús y su hogar. Como siempre, mi querida amiga llegaba tarde. Enseguida noté la presencia de un hombre merodeando por las inmediaciones. En apenas unos segundos se había colocado a mi lado y había adoptado la misma postura que yo al sentarse. Se notaba algo desasosegado. Yo lo miraba con disimulo. Suspiraba y se lamentaba en voz alta, quizás esperando a que yo le preguntara algo, pero no lo hice. Entonces fue él quien se dirigió a mí.

- Perdona, ¿te puedo hacer una pregunta? Es que estoy un poco nervioso porque tengo una duda muy grande y no sé quién me la podría resolver. Y te he visto a ti que con esas gafas tienes cara de ser una persona inteligente y saber cosas y bueno… quería preguntarte si tu me podrías ayudar.

Lo primero que pensé es qué tendrían que ver mis gafas con mi inteligencia, pero ese hombre parecía desesperado por saber un dato que quizás yo tenía, así que le pedí amablemente que me planteara sus dudas. Reproduzco la conversación:

- Verás, es que me han contratado unos extraterrestres para coger pimientos.
- ¿Unos extraterrestres?
- Sí, unos extraterrestres. Necesitaban gente para recoger pimiento en el campo y he empezado a trabajar con ellos.
- Anda, ¿y de dónde son?, ¿y cómo son? Es que yo siempre he tenido curiosidad por saber cómo son los extraterrestres.
- No sé de qué planeta son. Son verdes y cabezones y tienen tres dedos en cada mano. Pero eso no es lo que me preocupa.
- Ahhh, entonces qué te preocupa.
- Bueno, es que me hacía falta el trabajo y ellos me lo ofrecieron. El caso es que ahora me da miedo por si se montan en su platillo volante y se vuelven a su planeta sin pagarme a fin de mes.
- Pero vamos a ver, buen hombre. ¿Le han hecho contrato los extraterrestres?
- Sí…
- ¿Y le han dado de alta en la Seguridad Social?
- Pues eso no lo sé.
- Mire, lo que tiene que hacer es revisar su contrato. Si está dado de alta en la Seguridad Social planetaria y está cotizando en la tierra, no se tiene que preocupar porque las instituciones de aquí se harán cargo de un subsidio en el caso de que los extraterrestres no le paguen. Si en el contrato observa que está dado de alta en el servicio sanitario de otro planeta, entonces tendrá que pedirle a los extraterrestres que le den una garantía de pago…
- Pues no había caído en mirar eso. Muchas gracias. Ya sabía yo que tú eras una persona inteligente. Me voy corriendo a casa a revisar el contrato. No sé cómo agradecértelo.
- Anda hombre, no hay por qué dar las gracias. Vaya a casa a mirar lo que ha firmado y no se preocupe.

Aquel hombre se fue corriendo como alma que lleva el diablo. Y yo... yo todavía lo estoy asimilando.

miércoles, 20 de febrero de 2008

De frikismos

El otro día me comentaban que una da las características que denota que uno es un friki, es que acumula toda una serie de productos sobre un determinado tema, obra artística, lugar o agrupación. Entonces me vi en la obligación de exponer a mis interlocutores la siguiente disyuntiva:

- Si acumulo todas las obras de la generación del 98 ¿que soy?
- Pues una persona culta, amante de la literatura.
- ¿Y si acumulo las obras que componen las crónicas vampíricas?
- Pues una friki.

Supongo que lo mismo ocurre con el cine. Si coleccionas merchandising de Lo que el viento se llevó, eres un amante del cine. Si haces lo propio con El señor de los anillos, ya pasas al nivel friki. Por esta deducción, personalmente me resulta más que complicado colgar la etiqueta, aunque algunos lo hagan al vuelo. A mí me da bastante igual cómo me denomine la población, pero me llama la atención la pequeña línea que separa a una persona culta y respetable de un ser extraño.

¿Qué es exactamente el autor de este vídeo?

lunes, 18 de febrero de 2008

Dos veces en la misma piedra

Me juré y perjuré que no volvería a trabajar otra vez de lunes a lunes... Estoy empezando a plantearme si uno puede ser hipócrita consigo mismo.

sábado, 16 de febrero de 2008

Cuando suena el despertador

He de reconocer que una de las cosas que más detesto es que suene el depertador por las mañanas. Y es que hay gente que piensa que dormir es una pérdida de tiempo, pero particularmente opino que es una de las mejores opciones para perder el tiempo que existen. Disfruto durmiendo y ahora que ando un poco insomne, echo de menos las placenteras noches de descanso. Aquí os dejo un decálogo de cosas que pienso cuando suena el despertador.

1. ¿Por qué yo?
2. Con lo bonita que es la canción que tengo de despertador y el asco que le estoy cogiendo. Qué manera más tonta de odiar la música.
3. Un día de estos tengo que probar a acostarme vestida y así, una cosa menos.
4. ¿Tazón de café o tostadas con red bull?
5. Maldita sea, voy a llegar tarde. Debería haberme acostado cuando salieron Los Lunnis.
6. ¿Cuánta gente se estará levantando ahora mismo?, ¿estarán todos tan cabreados como yo?
7. Dicen que 10 minutos de técnicas de meditación oriental es como dormir 1 hora... Necesito mínimo un par de técnicas.
8. ¿Y si voy mañana y hoy me quedo durmiendo?
9. Seguro que los ricos no madrugan porque ninguno tiene ojeras.
10. Por último están las combinaciones de minutos: 5 minutos más y luego le piso un poco, 5 minutos más y desayuno en el coche, 5 minutos más y no me peino...

miércoles, 13 de febrero de 2008

San Valentín F.M.

Estaba haciendo memoria hoy y me he dado cuenta de que, en mi corta carrera profesional, esta fecha tan señalada por algunos me ha pillado nada menos que tres veces trabajando en la radio. San Valentín en este medio se vive de una manera especial. La fecha toma tanto protagonismo que parece ser lo único importante de la jornada. Para empezar el programa del día de San Valentín son necesarias tres cosas fundamentales: el micrófono, los cascos y la Banda Sonora de Titanic.

Este día, como día especial, te deja programar toda una serie de secciones que jamás podrías incluir a diario, cosa que la creatividad personal agradece bastante. Aunque la jornada resulte más original, lo que no cambia es la retaila de chorradas tipo: hoy es un día especial; qué bonito es todo; qué sensación tan maravillosa; si estás enamorado, aprovecha para demostrárselo a tu pareja; si no lo estás, hoy es un buen día para enamorarse... etc. etc. etc. Y es que si los locutores se repiten más que el ajo casero, en San Valentín la cosa ya se desfasa y, aunque lo intentes, es difícil no caer.

Otra cosa buena es que el oyente tiene mucha más participación y a los que nos gusta eso del feedback, disfrutamos más que de costumbre. Mandan poemas, declaraciones de amor, dedicatorias... El problema es que los mensajes que se envían a la radio durante este día, suelen ser un tanto repetitivos. "Te quiero, cuki. Ponme la canción de Titanic".... "Quiero decirle a mi niño que lo quiero un montón. Ponme la de mai jar guil gou on"... "Cuki, eres lo mejor que me ha pasado en mi vida. Ponme una de Camela"... Cuando llevas media hora así ya te da por pensar si todo el mundo llama cariñosamente "Cuki" a su pareja o si el tal "Cuki" es polígamo. Y por supuesto, no pudes dejar de lamentarte de que se hundiera el Titanic o, en su defecto, que no se hundiera antes. Lo que sea para que no hubiesen hecho la película.

La música es otro factor importante. Es el gran día de las baladas. Sinceramente con tres temas de bandas sonoras te puedes apañar: Top Gun, Gosth y como no, Titanic. Aunque lo que más te pide la audiencia es "una canción bonita" sin más señas. Claro, aquí te surge el dilema moral de poner una canción que tú consideras bonita, aún a riesgo de que tu jefe te haga tragar el micrófono, o poner... la de Titanic. En el fondo no me parece del todo mal dedicar una jornada a las baldas. Al menos durante un día te evitas escuchar regaeeton y similares.

Aunque esté despotricando mucho, he de reconocer que me ha encantado ser locutora en el día de San Valentín y que este año lo voy a echar de menos. Al fin y al cabo tu voz lleva un mensaje de amor a mucha gente, aunque tú realmente te sientas como una auténtica sujetavelas de cientos de personas.

Seria conclusión: cuando no estás enamorado, San Valentín es un día más. Cuando estás enamorado, San Valentín es todos los días.

martes, 12 de febrero de 2008

In-seguridad Social (Basado en hechos reales)

- Buenos días. Mi médico de cabecera me ha mandado al especialista. ¿Podría usted darme cita?
- Sí claro. Voy a consultar la base de datos.
- ...
- Tiene usted la cita para el 21 de mayo de 2008.
- Ahm... pero es que aquí pone que es urgente.
- Le he dado una cita urgente.
- Ya bueno, ¿y no podría adelantarla de ninguna manera?
- Si se encuenta usted muy mal, vaya a urgencias.
- Pero es que en urgencias me van a solucionar poco. Necesito la consulta de un especialista.
- El 21 de mayo de 2008 es la fecha más próxima.
- Pero es que de aquí al 21 de mayo...
- Su cita es el 21 de mayo de 2008... ¡Siguiente!
- Ehhh, bueno, muchas gracias.
- De nada. ¡¡Siguiente!!
- Oiga espere, y si me sale un alien del estómago, ¿me adelantarán la cita?
- ... ¿?
- Nada, olvídelo. Gracias de nuevo.
- De nada. ¡¡¡Siguiente!!!

domingo, 10 de febrero de 2008

Me he comido una oruga

Hará unos meses, mi perro amaneció con los ojos terriblemente inflamados. El pobre más que mirar, sospechaba. Llamamos corriendo al veterinario y nos dijo que posiblemente se habría comido una oruga peligrosa, pues el veneno de este insecto se manifiesta en los cánidos con una hinchazón de los párpados. Procedimos a ponerle algodones con manzanilla en los ojos, pero también se los comía. Con un poco de paciencia y mucho algodón, conseguimos que mi querido Ed dejara de sospechar.

Esta mañana, mientras me lavaba la cara, el espejo me devolvía una imagen similar. Mis párpados se encontraban terriblemente hinchados. Intentaba recordar cuándo me podría yo haber comido una oruga, pero no lo conseguí. Al final razoné que mi monstruosa apariencia se debía a lo poco y mal que duermo últimamente.

Recordé como tras cinco horas de insomnio conseguí conciliar el sueño. Me sumergí entonces en una de esas angustiosas pesadillas que interrumpes despertándote de forma sobresaltada. Segundos después, todavía con la respiración entrecortada, me situaba en la realidad y daba gracias de que todo fuese producto de mi malsano subconsciente. Tras beber agua y mirar el reloj, decidí darme una segunda oportunidad por ser hoy domingo. Un par de horas de desvelo más tarde, me sumergí en un maravilloso sueño donde me sentía absurdamente feliz por primera vez en mucho tiempo. En esta ocasión fueron los ruidos cotidianos de un hogar en fin de semana los que interrumpieron a mi subconsciente. De nuevo me desperté con la respiración entrecortada pero esta vez, me sentí realmente mal al tomar conciencia de la realidad.

Seguía arrojando agua helada sobre mis párpados marchitos, mientras analizaba mi tortuosa noche de descanso. Y por primera vez llegué a la triste conclusión de que en ocasiones es mejor tener pesadillas que sueños hermosos.

viernes, 8 de febrero de 2008

Momentos

En un determinado momento, no sé exactamente en cuál, eres consciente de lo mucho que lo vas a echar de menos cuando se termine. Supongo que esa sensación se produce cuando ves aproximarse el final. Simplemente te limitas a no contar los días porque parece que así no van a pasar. Hasta que llega la temida jornada definitiva y entonces, sin apenas tiempo para almacenar el último recuerdo, agolpas en tu mente todo lo vivido como miles de fotogramas que se atropellan en una sucesión imposible. Piensas que en un futuro lo recordarás y sonreirás, pero ahora estás en un extraño presente que te infunde una sensación de prematura melancolía. Han sido muchas cosas aprendidas, vividas y compartidas... muchas más de las que pensabas en un principio. De nuevo te invade esa horrible sensación de "vuelta a empezar" con una palpable certeza de que en esta ocasión, te va a costar más que de costumbre. Es en definitiva ese complicado periodo entre lo que se termina y lo que se recuerda.


miércoles, 6 de febrero de 2008

Tengo una debilidad...

Me dispongo a confesar una adicción de manera pública. Éste es un paso importante para mí porque es un problema que desde hace algún tiempo está empezando a preocuparme. Reconozco que me da vergüenza confesar esto y más teniendo en cuenta la cantidad de gente que se pasea por aquí últimamente, pero nunca he creído en los psicólogos y dicen que las penas con pan son menos. Así que, si os sentís familiarizados con el psicoanálisis, recibiré con sumo agrado las evaluaciones, sugerencias o consejos que queráis darme para poder superarlo. Bueno... ahí voy.

Tengo una enfermiza adicción por los cursos. Sí, sí los cursos. Al principio los hacía porque me interesaba el tema, porque tenía tiempo libre, porque quería ampliar conocimientos sobre una materia determinada... pero de un tiempo a esta parte siento que lo que empezó siendo un entretenimiento, se está convirtiendo en una malsana necesidad.

El caso es que mi agenda está más apretada que el sostén de una striper, pero aún así no lo puedo remediar. Ayer me llamaron para preguntarme si quería asistir a unos talleres y amablemente, le comuniqué a mi interlocutor que me lo pensaría, pues tenía bastante quehacer. Tras colgar, empecé a sentirme muy mal, tenía los mismos síntomas que un yonki con el mono. Miraba apresuradamente el teléfono y la agenda, y de nuevo el teléfono y de nuevo la agenda. Me repetía como voz de ultratumba: "no tienes tiempo, no tienes tiempo". Hasta que al final devolví la llamada impulsivamente para confirmar mi asistencia. Esto no sería preocupante si sólo tuviese que compaginar el citado taller con mi ya estresante rutina diaria, pero es que en el último mes me he apuntado a seis cursos más aparte de a éste.

De verdad que no sé qué mecanismo mental me empuja a este extraño abismo, pero he terminado por reconocer que tengo un problema. Maldita sea, ¿por qué no me cautivan los perjudiciales vicios del montón?


Aclaración sobre los premios

Vamos a ver. Mohikana me concedió el premio que está sobre el fondo blanco. Como norma, yo tenía que conocerder el mismo premio a 7 blogs que visitara con frecuencia. Como no quería restringir a sólo 7 blogs, me inventé con guasa, cachondeo y anarkismo el premio propio de mi blog. Así podría premiar a título personal a quien yo quisiera sin normas ni límites, e incluso gente que no tiene blog porque no tiene tiempo para hacerse uno y sólo comenta. Veo que algunos os habéis atribuido el galardón que está sobre el fondo blanco. A mí me da exactamente igual que os lo coloquéis. Sólo quiero que quede claro que la finalidad era destacar los blogs que normalmente visito, que si os dais cuenta son prácticamente los mismos que tengo enlazados. Dicho lo dicho, colocaros lo que queráis donde queráis, pero pido que no se me malinterprete, que todo está hecho de muy buena fe.

martes, 5 de febrero de 2008

And the winner is....

Esta entrada no va sobre los premios Goya, aunque aprovecho para felicitar a Roque Baños (murciano de la mismísima Jumilla) por su Goya a la mejor Banda Sonora.

El caso es que mi querida Mohikana me ha premiado en su blog. Ella tenía que elegir entre los blogs que normalmente visita y ha escogido el mío (te tengo dicho que no te pimples el orujo a media tarde). Quiero agradecerle el detalle más incluso que el premio. Me siento realmente afortunada cuando alguien se acuerda de mí para lo que sea. Muchas gracias bonica!!! Bueno, pues éste es el premio que me ha otorgado la galleguiña salerosa:


Yo ahora tengo que, según las instrucciones, otorgarle el mismo premio a siete blogs. Pero como soy tan macarra, he decidido crear mi propio galardón que no tiene ninguna notoriedad pero está confeccionado y otorgado con todo el cariño del mundo. Con ustedes... The Dark Sunrise Awards...


Este premio va dirigido a:

Ego: por comerse la llave del candado del diario y publicar sus devenires cotidianos.

Doc.jkl: por conseguir que las banalidades sean importantes.

Blackheart: por compartir sus sentimientos y vivencias de una manera tan especial.

Luna: por la sensibilidad de su blog y sus siempre agradables comentarios.

Ed.expunctor: por la calidad de sus relatos breves, aunque odie a los de mi especie (periodistae currantis).

Perelló: por ser siempre él, por todos los momentos (pasados y futuros) y por las almejas machas.

No name: por ser tan original, por currarse tanto las entradas y porque Conrado nunca apareció.

Mohikana: por su humano análisis de los sucesos cotidianos, por sus principios y por sus leyendas del norte.

Arol: por reivindicar con honra y orgullo la denostada figura del gótico friki.

Además, estos premios también van a título preventivo. Serán igualmente galardonados cuando se hagan un blog:

Verónika: porque escribe muy bien aunque ella no se dé cuenta y porque tiene una gran sensibilidad para plamar sus ideas y sentimientos.

El que no recuerda el loggin: porque sus reflexiones y anécdotas (sin excepción) son muy interesantes, porque tiene una visión de la vida tan optimista que da gusto escucharlo y porque es más salao que las sardinas.

Mi querido nómada: porque tiene muchas cosas que contar y compartir y porque algunas de sus reflexiones son dignas de incluirse en el patrimonio de la humanidad.

---- ÚLTIMA HORA----


La asociación de premios The Dark Sunrise ha decidido ampliar su selección de galardonados, según declaraciones de su presidente, que es un mono con una ballesta. El portavoz de dicha asociación no gubernamental pero con mucho ánimo de lucro ha confirmado que olvidó dos de los premios en la parte de atrás de la flagoneta y que por puro despiste no los pudo entregar. Por eso emplaza a las personas que a continuación se nombran a recoger sus premios en algún portal de la Gran Vía, ya que la gala de entrega se ha suspendido por una huelga a la japonesa de los ayudantes de iluminación.


Amayya: porque su blog es todo un cúmulo de experiencias cotidianas analizadas desde un punto de vista de lo más original y porque invita reflexionar en cada una de sus entradas.


Sátirablanca: porque en su blog incita a la concienciación social.


¡Enhorabuena a los premiados!

sábado, 2 de febrero de 2008

Su media naranja

Nos pasamos la vida buscando a nuestra media naranja. O al menos, eso es lo que nos han dicho que tenemos que hacer. Supuestamente la persona perfecta debe encajarte en tres niveles: el físico, el emotivo y el intelectual. Lo que es lo mismo, la persona perfecta debe gustarte físicamente, debe gustarte como persona y debe gustarte cómo piensa. Si logras conectar los tres niveles, estás claramente ante tu media naranja.

El problema es que es complicado encontrar una persona que te vaya como hecha a medida. A menudo encajamos en un solo nivel. Las parejas bien avenidas pueden incluso encajar en dos. Y los menos, ya se completan en todos los niveles. También nos han contado que una relación no se sustenta con un sólo factor de enlace, pero yo cada día veo más relaciones basadas en un único nivel.

En los tiempos que corren, indiscutiblemente el valor añadido está en el físico. Sólo hay que pensar en la cantidad de gente que conocemos que está con una persona simplemente porque está cañón, aunque le interese poco más de él o ella. Y existen relaciones que duran y perduran sostenidas en el frágil hilo de la estética. No quiero decir que sólo pase con esto. También se escucha lo de "no, si no es que no l@ quiera, pero es que es tan buena persona..."

Es obvio que cada uno le otorga más importancia a un factor determinado. Personalmente yo me dejo llevar mucho por lo del intelecto. Pero a menudo se me plantea una disyuntiva. No sé si lo de quedarnos a medio gas es por que realmente la teoría de la media naranja no es aplicable a la práctica o si es por mero conformismo.

Cuando me preguntan cómo sería mi chico ideal, no puedo evitar dividir mi respuesta en estos tres niveles. Si algún día se encajaran como por arte de magia, sería la misma leche.